Este domingo 11 de marzo se adelanta el reloj una hora y comienza el horario de verano en Estados Unidos. El cambio de horario es tema de todos los años, pero aún no logramos acostumbrarnos; ya sabemos que ocurre, pero muchos aún lo resienten, sobre todo cuando se trata de atrasar el reloj.
Y es que, aunque uno ya lo vea normal, el organismo no. En el tema muchos especialistas han opinado y las conclusiones son que los efectos del cambio de horario en las personas, aunque leves, tienen su reflejo en la salud. Aunque las consecuencias son transitorias y leves en la población sana, el organismo necesitará 4 o 5 días para acoplarse, aunque en casos especiales puede ser mucho más tiempo.
Pero para hacer un poco más llevador el cambio, acontinuación algunos tips que podrían ayudarte a no sentir tan fuerte nuestro cambio de rutina:
- Hacer una adaptación lenta y progresiva al nuevo horario, adelantando la hora de levantarse, al menos 15 minutos antes.
- Mantener horarios fijos para acostarse y levantarse de acuerdo a las necesidades de sueño de cada uno.
- Evitar consumir bebidas estimulantes, al menos tres horas antes de dormir.
- Es importante adecuar los horarios de los alimentos al nuevo horario. La cena deberá ingerirse un par de horas antes de dormir para facilitar el sueño, sin sentir pesadez o indigestión.
- En el caso de los niños, es importante realizar un reordenamiento de sus horarios, ya que para ellos puede resultar más difícil comprender este cambio, dado que no se rigen por relojes, sino por la presencia de luz solar.
